Postcirugía, mi Madre.

El 26-01-1976 muere Mi Madre.

El 23-12-1975 se le hace cirugía de tumor cerebral, meningioma del tercio externo del ala menor del esfenoides.

Todo el postoperatorio lo pasa en estado de coma. Presenta una ventana quirúrgica a nivel témporal/parietal izquierdo; no tiene hueso.

A lo largo de todo el postoperatorio la ventana crece en volumen por la protusión del contenido del encéfalo. 

Con episodios varios de fiebre que se refieren de origen urinario, consecuencia de mantenerse con sonda vesical.

Durante todo el postoperatorio tiene abundantes secreciones bronquio/orales que se extraen mediante aspiración, cuando se aprecian problemas ventilatorios.

Todo elmpostoperatorio permanece en decúbito supino y con el cuello en extensión.

El día 26-01-1976, en la mañana y, ante mi presencia, hace una parada respiratoria. 

El médico responsable solicita a la enfermera que se llame al médico anestesista para que la intube.

Ante esta actitud le ordeno a la enfermera que me traiga el instrumental para incubara yo.

El médico dice que espere a que venga el anestesista. 

Le respondo que salga él de la habitación, antes de que yo lo haga.

El médico accede a mi exigencia y yo procedo a incubar a la paciente, no ya a mi madre. Tras in tumbarla por vía nasal, ya que no se disponía de dispositivo de aspiración, la paciente hace parada cardiaca. La desciendo al suelo y procedo a una estimulación mecánica externa del corazón.

La paciente muere. Mi madre ha muerto.

Ordeno que retiren el cadáver. Doy gracias a todo el personal allí presente y que colaboró profesionalmente. 

Dije, adiós. Me fuí.

Ese mismo día pedí permiso a la Gerencia del Hospital General de Asturias para dedicarme al estudio de la Neurocirugía. Me pidió que lo pensara durante un mes.

Así lo hice. Tras un mes en el Servicio de Neurocirugía, hablé con el Dr. Don Alberto Andrés Fernández Serrats, le dí las gracias. Hablé con el Sr. Gerente, le dí las gracias y me dijo "acaba de hablar conmigo el Dr. Serrats, ¿Qué piensas hacer?, me dijo.

Le respondí: en Neurocirugía hay mucho trabajo que hacer y me gustaría participar. ¿Estás seguro, Augusto?. Si, totalmente seguro. 

No me arrepiento. 

Cuando volví a la planta fué a Sobrado, Quintana ynJulio a quién primero se lo dije. Un excelente servicio de enfermería, sin el cual, mi formación y actividad no hubiera sido posible. Tengo a todos, muy presentes.

Cogí la historia clínica de la paciente Gloria y puse la primera anotación como médico del servicio:

Dispóngase: (el término Órden Médica no lo volví a utilizar jamás).
. Decúbito supino con elevación tóraco/cefálica a 30 grados.
...
Quintana, en la Unidad de Enfermería, ha de haber diempre una Caja de Urgencias para proceder a la intubación inmediata, si fuera necesario. Todos los días se comprobará que la aspiración central funcione adecuadamente en cada una de las camas. Hablaré para que se traiga un aspirador auxiliar.
¿Tomamos un café?.  Y compartimos el café en el Office, y mil veces más.

Sobrado, escribo esto en recuerdo tuyo. Un beso, donde quiera que estés.