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15 ago 2015

¡Eh, la escritura!: El grado cero de la escritura.

Al escribir sobre la aparición de la consciencia, hago recuerdo de Roland Barthes

El grado de la esritura
Roland Barthes
1997



Parte I
¿Qué es la escritura?
Sabemos que la lengua es un corpus de prescripciones y hábitos común a todos los escritores de una época. Lo que equivale a decir que la lengua es como una naturaleza que se desliza enteramente a través de la palabra del escrito, sin dsrle, sin embargo, forma alguna, incluso sin alimentarla: es como un círculo abstracto de verdades, fuera del cual, solamente comienza a depositarse la dendidad de un verbo solitario. Encierra toda la creación literaria, algo así como el cielo, el suelo y la interacción dibujan para el hombre un hábitat natural. Es menos una fuente de materiales quebun horizonte, es decir, a la vez límite y estación, en una palabra, lavestaciónbtranquilizadora de una economía. El escritor no saca nsda de ella en definitiva: la lengua es para él es más birn como una línea cuya transgresión quizá designe una sobrenaturaleza del lenguaje: es el área de una acción, la definición y la espera de un posible. No es lugar de un compromiso oficial, sino sólo reflejo sin elección, propiedad indivisa de los hombres y no de los escritores; permanece fuera del ritual ee las Letras; es un objeto social por definición, no por elección. Nadie puede, sin preparación, insertar su libertad de escritor en la opacidad de la lengua, porque a través de ella está toda la Historia, completa y unida al modo de una Naturaleza. De tal manera, para el escritor, la lengua es sólo un horizonte humano que instala a lo lejos cierta familiaridad, por lo demás negativa; es decir que Camus y Queneau hablan la misma lengua, es solo presumir, por una operación diferencial, todas las lenguas, arcaicas y futuristas, que no hablan: suspendida entre formas aisladas y desconocidas, la lengua del escritor es menos un fondo que un límite extremo; es el lugar geométrico de todo lo que no podría decir sin perder, como Orfeo al volverse, la estable significación devdu marchs y el gesto social de su sociabilidad.
[...]

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