A mi hija sola.
Y allí le cogió la Luna.
Vestida de negra seda.
Y corona de brillante estrella.
¿Porqué subiste a la Alhambra,
Siendo doncella?.
Padre, tu no estabas.
Tu no estabas, padre.
Como siempre,
Me dejaste sola.
Como siempre,
Estaba sola.
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