Buscar en este blog

22 abr 2015

Sobre la España rugosa y la España lisa. No hay dos Españas, sino Una.

El derecho a la libre circulación y los derechos que de ella se derivan, me obliga a recordar la nota de este diario en otro momento hecha pública.

He hablado del abogado y el derecho que toda persona tiene a elegir a quien le represente ante los tribunales de justicia de cualquier Estado.

Lo dicho sobre el abogado es aplicable al médico y al educador.


La relación entre la España rugosa y la España lisa supera con creces los 3,14. Y, lo que no parece enorgullecer a los maestros canteros de esta catedral, o edificio que se eleva camino del Paraíso, es que este crecimiento progresa a un ritmo que hace pensar que ya está pronta su caída por derrumbamiento.

Desde tiempos en los que la Historia ha nacido, el respeto hacia, el ahora nombrado número "pi", ha hecho posible acrecentar nuestra independencia del Medio esclavista al que estamos sometidos. Hoy, al igual que ayer, llamo a la rebelión contra quienes osan poner sus botas sobre nuestras cabezas.

Reproduzco la nota a la que me refiero.




España
1960, de los países de Europa más jóvenes.
2060, de los más viejos; 49,7 años

Tendremos un 20% menos de 25-54 años que ahora.

Ayer he tenido en la Consulta un paciente de 83 años que en los últimos siete meses ha tenido 8 ingresos en un hospital. 

La razón de estos ingresos es la misma que motiva el ser asistido actualmente.

La Persona que he recibido y con la que he parlamentado, acompañada de sus día hijos, no está enfermo, sino que tiene un problema de salud; que vive mal. Es decir, se hidrata, se nutre y descansa de modo no adecuado para su edad, ni tampoco lo ha hecho para vivir 80 años. Los hijos, tampoco están viviendo para vivir 80 años, como reconocen.

La Persona, llega a paso lento, corvado ligeramente hacia delante, brazos caídos, mandíbula caída que deja la boca entreabierta con los labios secos y saliva reseca en las comisuras por el continuo jadear del caminante al final del camino.

Me recordaba la imagen de aquella persona que cerca ya de la meta de la carrera en la que participaba como esclavo a la entrada del Coliseum, se le jaleaba para espirar sus últimos pasos en la vida y así contemplar su muerte como espectáculo. Luego los espectadores agradecidos por haberles permitido disfrutar de su sufrimiento referían en murmullo de coro trágico: "no es humano, no es humano". Se levantaba de su trono el emperador Nerón y decía, no es humano, es de esclavo". Luego, todos acotaban tan sabias palabras diciendo: "así sea César, así sea. Los dioses salven a César". Luego, continuaban su vida de idiota, caminando sonrientes a sus dominios. El sol se acostaba y la ciudad enmudecía.

Os anuncio, pueblo de Asturias que los idiotas disfrazados de políticos nos han construido un Coliseo en la Cadellada, donde podremos disfrutar del morir agonizante de los esclavos, en el final de la carrera que ya hace tiempo han comenzado desde el Este al Oeste, desde el Norte al Oeste, pasando por el Este y desde las montañas del Sur al Oeste.

Agradecidos estamos quienes hemos tenido el ocaso de vivir los días de Político el Magnifico, aquel elegido de los dioses para mortificar nuestros cuerpos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario