Teniendo en cuenta que los españoles colonizadores de América dieron muerte al noventa por ciento de la población indígena mediante los microbios que portaban desde Europa y que no estaban presentes en América y, por ello, los indígenas estaban indefensos frente a ellos.
La llegada de seres humanos a Europa traen consigo, formando parte de los mismos, microbios que en este territorio no existen y que, por ello, los indígenas estamos indefensos frente a ellos.
De igual modo y manera los indígenas europeos estamos transmitiendo a los inmigrantes microbios no existentes en sus tierras de origen y que, por ello, se muestran indefensos frente a ellos.
La diferencia entre el siglo XV y el XXI es que tanto unos como otros indígenas somos ignorantes de tales hechos.
Sin embargo, en el siglo XXI los humanos somos sabedores de la existencia de microbios y que los mismos forman parte inseparable del resto del cuerpo, o territorio biológico que habitan o, que los microbios son tan indígenas como los humanos del que denominamos "viejo mundo", o "cuerpo humano" visto desde la resolución óptica del ojo humano.
También sabemos que los microbios que forman parte constituyente del individuo humano tienen propiedades singulares consecuencia del hábitat y que, habitualmente no se reconocen entre sí y que se rechazan con violencia destruyendo al propio individuo humano. En este tipo de inmigración/emigración el tiempo de comunicación es muy corte y el de destrucción del indígena tiende a ser nulo.
La diferencia entre los siglos XV y XXI (recuerdo que es el siglo en el que vivimos) es que los tiempos de comunicación son inferiores al día y que el número de individuos en migración es muy superior al de aquel siglo referido como "descubrimiento" de un mundo geográfico. De igual modo, el tiempo de dispersión por el territorio es de minutos y horas.
La arribada al aeropuerto supone el contacto inmediato con los indígenas del aeropuerto pero también con los indígenas de otros territorios "en tránsito".
Otra diferencia que va a favor de una "integración" del inmigrante con el indígena es la existencia de las telecomunicaciones y de un Centro Internacional de Información y Documentación Sanitaria que "alarma" uno y "controla" otro, a todo individuo humano y no humano macroscópico y microscópico, así como de cada hábitat del cual procede el inmigrante, al que tiene por destino y todo aquel por el cual transita.
Este Centro Internacional de Información y Documentación Sanitaria está dispuesto por parte de la empresa Mazuren Technology.
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