Faustino Cordón. Investigación. Continuación.

Término la nota hecha hace unos días al decirme que no encuentran esta reseña bibliográfica. La termino y doy la referencia de la edición de 1982 que es la que tengo. No sé si hay ediciones posteriores.

Es, para mi, de gran interés las últimas líneas de la cita.
Faustino Cordón: Investigador.

Esta nota de Faustino Cordón permite conocer. Leerlo es necesario. Leerlo y se llega a distinguir investigación de experimentación y de erudición.

Virchow y desde entonces los citólogos consideran de modo ahistórico e idealista la célula como el sustrato "esencial" de toda vida, y, en consecuencia, por una parte, hacen caso omiso de su origen y relación permanentes con el nivel inmediato inferior (ante todo por el desconocimiento de la existencia de seres vivos de nivel intermedio entre la célula y las moléculas: los individuos protoplásmicos); y, por otra parte, niegan su carácter de ser vivo genuino, de individualidad del nivel supracelular, al animal (no obstante lo obvio que este carácter es para nosotros en cuanto animales que somos) y reduce el individuo animal, como si fuese una planta, a una mera asociavión de células a las que considera portadoras exclusivas  -yo diría mágicamente exclusivas- de la cualidad abstracta de la vida (*). Teniendo en cuenta esta incapacidad de la biología de establecer ni siquiera empíricamente - ni menos experimentalmente- los diversos niveles de ser vivo (por lo que siguen inextricablemente enmarañados fenómenos procedentes  de tres niveles de integración distintos) explica que los biólogos con voluntad de elevar la biología desde el conocimiento puramente empírico (la descripción y la clasificación de los seres vivos) al conocimiento experimental (operar sobre ellos conforme a previsión teórica) hayan tendido a apartarse del objeto del conocimiento propio de la biología y a remitir los problemas propios del ser vivo al nivel inorgánico superior, tal como este se presenta en los seres vivos, nivel este que si, desde mucho antes que Marx, era objeto de conocimiento experimental: el propio de la química. De esta tendencia, que ha desviado de la biología de su objeto genuino aunque ha conquistado (por la bioquímica y la genética) un gran acervo de datos, inestimable si se interpreta debidamente, no puede escapar Engels cuando afirma, en L"a dialéctica de la naturaleza" que la vida es la química de la albúmina.

(*) Esta incapacidad de distinguir como dos niveles distintos, superpuestos, de ser vivo a la célula y al animal impide que Pavlov, a pesar de habernos enseñados actuar  experimentalmente sobre el individuo animal, no lograse interpretar el organismo animal como algo surgido de las células somáticas (directamente de las neuronas) pero distinto de ellas, e interpretase de modo mecánicos ta el proceso de la acción y experiencia animal por él descubierto, reduciéndolo a una mera cooperación entre células. La misma confusión de niveles ha desorientado el enfoque de la ontogénesis y herencia animal, reduciéndolas a la genética celular.

La biología evolucionista y la dialéctica.

Faustino Cordón

Editorial Ayuso

Fundación de Investigaciones Marxistas

1982

ISBN: 84-336-0206-3