Lughones y Mazures. Comienza un nuevo Pueblo.
Sacro corto y segmento lumbar largo con inversión de la lordosis, segmento dorsal con cifosis próximal que le induce hiperlordosis cervical próximal que, a su vez, le proyecta hacia delante y abajo la mandíbula provocando la sobre-oclusión que le impide el aprovechamiento de las carnes crudas, o duras.
La posición bípeda se hace con flexión anterior del tronco con obligada elevación de párpados superiores. Su marcha es con braceo de baja amplitud con extensión de los codos, lo cual le produce una reducción en la capacidad pulmonar y, con ello, desplazarse a cortas distancias por cansancio. El trabajo no lo tiene que hacer con periodos largos de descanso, lo que le reduce la constancia y, con ello, la pérdida de la atención necesaria para hacerlo con detalle. Sus trabajo resulta tosco, poco eficiente, por lo que ha de ser utilitario. No consigue llegar a desarrollar el juego. Así, es un Individuo Himano que vive el momento, no proyecta a futuro, divide escasamente el trabajo y, con ello, no avanza socialmente. Sus agrupaciones son de pequeño número de individuos. No desarrolla la sexualidad y, por ello, los enfrentamientos violentos son frecuentes. Desarrolla la genitalidad como medio de resolución inmediata de conflictos.
Dada la disposición del cuerpo, las rodillas en flexión le imposibilitan el afrontar su entorno en altura. No entiende la necesidad de mirar a los ojos. No besa. Las relaciones con los demás se establece cuando estos están abatidos en el suelo. Es, por ello, incapaz de actuar en grupo colaborativo. Sus agrupaciones son pequeñas de origen en la sangre. No hay abuelos, viven hijos y padres; la alianza entre grupos evitó la consanguinidad y, con ello, sobrevivió a cambio de perder identidad.
Vivieron junto con otras etnias con las que la diversidad genética los ha hecho confundir su identidad.
El pueblo que habitó la montaña sagrada denominada Naranco por los lughones, no era Veton, sino celta venido junto a aquellos desde Mazuria en Polonia y Bielorusia actual y, a su vez, estos eran hombres a caballo, o kurdos. Los lughones les llamábamos Mazures y, el asentamiento Mazuren. Tenían dos asentamientos principales, Mazuren y Brañes.
Sacro largo y segmento lumbar corto con pequeña lordosis. Segmento dorsal con pequeña cifosis próximal que le induce una corrección de la lordosis cervical. Esta disposición produce una normo-oclusión con mirada al frente. Su nariz es piramidal. Sus ojos verde turquesa. Sus manos largas con muñecas pro racionadas. Sus condón en mínima flexión y rotación interna de antebrazos y manos, con extensión de los dedos. Su voz es nítida, oral. Su lenguaje gentualla es rico.
Sus caderas se articulan sagitalmente. Su marcha bípeda se acompaña de braceo discreto que le permite una capacidad pulmonar óptima y, con ello, no ser cansina, lo que le permite realizar trabajo eficaz y eficiente.
Tal disposición de la postura le permite la mira a los ojos del otro y, con ello desarrollar la sexualidad como medio para la resolución de los conflictos y, con ello, abandonar la genitalidad para hacerlo. Así, el Mazur es social contrariamente al Lughon que es poblacional. El Mazur desarrolla agrupaciones de un mayor número de individuos donde conviven familias diferentes genéticamente, basadas en la sexualidad y, por ello, la palabra, cuya manifestación es el beso, el abrazo del cuerpo y el estrechamiento de la mano, como medio para la resolución de conflictos, o desavenencias. Con los Mazures aparece la figura del dux, o autoridad. Contrariamente, con los lughones se desarrolla agrupaciones de pequeño número de individuos, donde conviven familias iguales genéticamente, basadas en la genitalidad y, por ello, la fuerza, cuya manifestación es el grito, la coraza y la mano armada, como medio para la resolución de conflictos, o desavenencias. Con los lughones aparece el Jefe, o Poder que, por ser consanguíneo se hereda, apareciendo la figura de Rey. Sin embargo, entre los Mazures aparece la autoridad principal de entre los grupos, o pueblos que se relacionan; Principal, o Príncipe.
Con la llegada a Lughonia del Pueblo de Roma, aparece el desarrollo de las comunicaciones, o Vías que van hacer posible el desarrollo de los mazures y el declinar de los lughones.
Con las Vías entre poblaciones viene desde Roma un modo de vida que llaman Cristiana que frena el desarrollo de los Mazures en favor de los Lughones.
Este hecho se va a apreciar como los Mazures del Oriente de Asturias se comportan de forma ambigua. Así, se unen distintos pueblos nombrando a un Príncipe para rechazar su relación con los Árabes llegados al lado sur de las montañas. Por otro lado, se unen a los Cántabros para aumentar su poder frente a los Árabes. Lo hacen a través de la genitalidad, uniendo, haciendo alianza a través de la hija del Principe Mazur y del Dux, o Jefe Cántabro. Del Principe Pelayo Astur con el Duque Pedro Cántabro.
Tal alianza, que posteriormente traerá siglos de confusión en la estructura del que será llamado Reino, o Ducado de Asturias unas veces y otras Principal, será consecuencia de la influencia cegadora de la razón de los Mazures por parte de la concepción ciega del llamado Cristianismo. Tal es así que, en vez de continuar en el desarrollo social emprendido por los Mazures desde el poblacional de los lughones, abandonan en el uso de la fuerza para imponer el Cristianismo al Mahometanismo.
En contra, no usan la palabra para asimilar el Árabe que llegaba, al igual que habían hecho cuando les llegó el Romano.
Sus palabra nasal se entrecorta a ráfagas por la ventilación nasal, al tener una reducida movilidad costal por la posición.
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