La situación social por la que estamos pasando los Estados Teocráticos, sólo cederá tras su transformación en Estados Laicos, Racionales, o Constitucionales. Debemos conducir las relaciones entre Individuos Humanos según los Libros Constitucionales Racionales, o Humanos. Hemos de abandonar el conducirlas según los Libros Revelados, Irracionales, o Divinos.
Los falsos Estados Constitucionales actuales, surgidos tras la llamada Revolución del Pueblo de Francia (revolución, o revolverse contra el Poder Venido de Dios a través de la Sangre Real o del Nombramiento del Elegido por Dios, o Iglesia), aún no se han quitado de encima el Poder Divino, enmascarado con nombres de Políticos, de Partidos, de reyes, presidentes y parlamentos.
Es curioso, por enésima vez anotado en este diario, como se habla de estados teocráticos como Irán, Corea, Unión Soviética, Cuba, etc, a la vez que aquellos que dicen de estos, no manifiestan rubor cuando se dicen confesionales, juran hacer por los hombres, etc.
Los cristianos y judíos niegan a los mahometanos, su condición de hermanos con el mismo padre. Y, los mahometanos no hacen más que manifestar que son hijos naturales con la misma condición de hijos que los judíos y los cristianos. Y, ante la negación de estos hecha con las armas, ellos hacen lo mismo en respuesta a tal actitud.
Los cristianos niegan la condición de primogenitura a los judíos. Y, dentro de los judíos algunos exigen el reconocimiento de su condición de primogenitura. Los cristianos hacen lo mismo. Y, los judíos también. En el resto de las divinidades no venidas de Abraham tienen igual problema.
Los únicos Individuos Humanos Racionales son los lughones, al no considerarse hijos de nadie, sino surgidos del caos tras poner orden, o Constitución a éste.
Los lughones nos consideramos diferentes entre nosotros. Y, en esa diferencia, es donde apreciamos la riqueza de nuestra convivencia que ha dado lugar a evolucionar hacia un Individuo Himano SupraIndividual resultante de la interacción entre nosotros.
Los lughones no hablamos "mi cabeza" como un elemento que nos pertenece. No somos un Ser Divino, o Noble que habitamos un Cuerpo No Divino, o Vulgar. No poseemos cuerpo alguno, somos. Y, por ello el Individuo Humano Lughonia, no es un Ser Divino, o Pueblo Divino, o Noble que habitamos un Cuerpo, o Territorio No Divino, o Vulgar.
Los lughones, todos, nos miramos a los ojos, nuestra mano derecha se apoya en el hombro izquierdo del otro y, con nuestra mano izquierda extendida más allá de nuestra existencia, rodea el cuerpo del otro, en señal de Ayuda y Socorro Común a la Vida surgida de nuestra relación.
Extendemos nuestra bandera, llamando a todo Humano y No Humano, Viviente y Existente, a compartir con nosotros y a compartir con el resto. De ahí, su azul de Universo No Finito, su amarillo de Universo Finito y, su Verde, expresión de la Interacción, que no de fusión, entre el Todo y la Parte, entre el Universo y el No Universo, entre lo General y la Parte.
La mirada del médico norteamericano Nidal Malik Hasan, habla del temor a mirar a los ojos de los Individuos Humanos. Médico y Creacionista sólo genera perplejidad y, por ello, descarrío en sus relaciones.
Esta es una mirada que he observado con harta frecuencia en mi vida personal y, principalmente profesional como médico.
Ayer hablaba de la perplejidad del médico ante el Individuo Humano que le pide ayuda y socorro. Su proceder se descarría huyendo cuesta abajo y diciendo "tiene que acostumbrares a vivir con el dolor, que Dios le dio como prueba para purgar el pecado cometido por los suyos, y que por su condición miserable está condenado a penar eternamente al pertenecer a un Pueblo, una Familia No Elegida por el Señor Creador del Cielo, las Tierra y todo aquello que lo habita. Recuerde que entre El Creador y el Creado hay una relación de sumisión y sufrimiento del Creado para Vanagloria del Creador ante si mismo. Y, de su condición homosexual todopoderosa homocreadora, no pudo soportar la mirada de La Todopoderosa Creadora. De esa mirada cruzada entre Jhavé y Astarté surgió el fratricidio. Jhavé no pudo compartir su Gloria Creadora con Astarté y, durante el sueño de esta, le asestó un fuerte golpe en la cabeza con la mandíbula de un Burro. Y, tras encontrarse sólo, no pudo soportar su condición homosexual, por lo que buscó en la creación del Hombre y la Mujer, recrear lo que él había destruido. Y, con el sufrimiento de sus creaturas se siente complacido y resarcido de un error que, como Sumó Hacedor, nunca ha llegado a entender. Nunca ha podido comprender que Él, Dios, pueda errar como el vulgar ser creado, u hombre.
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