Hoy como ya anoté, me encuentro en el Campo de San Jorge, donde ha tenido lugar la "Batalla de Aljubarrota" que enfrentó al Reino de Portugal al Reino de Castilla, Juan I de Portugal frente a Juan I de Castilla. Castilla aliada con Francia y Portugal con Inglaterra. La derrota de Castilla frente a Portugal dio lugar a la independencia del Reino de Portugal del Reino de Castilla.En la fotografía del texto tomado de ABC, se pueden ver las tropas de Castilla, con el pendón real de Juan I, y, a la derecha las de Portugal, con el pendón real de Juan I.
Se dice que esta es una batalla olvidada por Castilla. Sin embargo, he de decir que, con mi presencia, he de demostrar como no lo está; porque Castilla tiene Memoria y, Asturias, también.
Juan I de Castilla, con fiebre alta, se puso al frente de su ejército situado en la pendiente de un Otero, haciendo frente al sol que, en su ocaso, les cegaba y que un catorce de agosto les abrasaba con su abrazo.
Juan I de Castilla y, a su derecha, su leal Alférez Real Don Gutierre Bernaldo de Quirós, al frente de su ejércitto comenzaron el ascenso al campo de San Jorge, donde parapetados y con el sol a sus espaldas, Juan I de Portugal al frente de su ejército, les hacían frente desde el alto.
Juan I de Castilla, con fiebre, cae desvanecido tras ser abatido su caballo. Don Gutierre, pié en tierra y con el cendal colgado a sus espaldas, le cede su caballo y, arreando a este hace salir del frente de batalla, quedando él a descubierto y con pié a tierra. Es tumbado y, al negarse a ceder el pendón real, al que asía contra su pecho tomado con manos y dientes, le fueron amputadas sus manos y destrozada su cara, muriendo desangrado antes de traicionar la lealtad que había jurado a Don Juan, su rey.
Con Don Gutierre muerto y el pendón real en manos de Portugal, el ejército de Castilla cedió sus posiciones a las que dio sus espaldas, siendo diezmado en su retirada.
Junto a los innumerables soldados castellanos que dieron su vida por evitar que la unidad de los pueblos de Portugal y Castilla se rompiera, murieron nobles como los hermanos de Don Gutierre, Lopy y su primo García de Quirós, dejando así presente el esfuerzo del Reino de Asturias por mantener tan noble propósito como es el de mantener unidos todos los pueblos ibéricos. De igual modo, dejaron su vida nobles Castellanos como Pedro González de Mendoza, señor de Hita y Buitrago, Juan Téllez de Castilla, señor de Aguilar de Campoo y primo hermano del rey, Diego Gómez Manrique de Lara y Leyva, señor de Amusco y Treviño, Juan Fernández de Tovar, Almirante de Castilla y señor de Berlanga, casado con una sobrina del rey, Diego Gómez Sarmiento, Mariscal de Castilla y I señor de Salinas, Juan Alfonso Tello, VI conde de Barcelos, almirante de Portugal y hermano de la reina, combatió en el bando castellano, Pedro Boil, señor de Huete y señor de Masanasa, aragonés de nacimiento, Juan Alfonso de Ajofrín, del linaje toledano de los Ben Furon, Gonzalo Díaz Carrillo, hijo del señor de Mondéjar. Todos ellos pertenecían al más alto escalafón social y nobiliario, lo que causó gran luto en Castilla.
Ayer he podido sentir en mi, no el abrasador calor pero si el cegador sol que estos hombres han tenido que padecer antes de morir en propósito de la tan ansiada unidad del territorio ibérico donde convivir todos los pueblos que lo habitamos.
Hoy he rendido cuentas del compromiso contraído con mi padre y abuelo de visitar esta sagrada tumba familiar. Lo hago en nombre de mis familia y en compañía de mis amigos
Juan I de Castilla y, a su derecha, su leal Alférez Real Don Gutierre Bernaldo de Quirós, al frente de su ejércitto comenzaron el ascenso al campo de San Jorge, donde parapetados y con el sol a sus espaldas, Juan I de Portugal al frente de su ejército, les hacían frente desde el alto.
Juan I de Castilla, con fiebre, cae desvanecido tras ser abatido su caballo. Don Gutierre, pié en tierra y con el cendal colgado a sus espaldas, le cede su caballo y, arreando a este hace salir del frente de batalla, quedando él a descubierto y con pié a tierra. Es tumbado y, al negarse a ceder el pendón real, al que asía contra su pecho tomado con manos y dientes, le fueron amputadas sus manos y destrozada su cara, muriendo desangrado antes de traicionar la lealtad que había jurado a Don Juan, su rey.
Con Don Gutierre muerto y el pendón real en manos de Portugal, el ejército de Castilla cedió sus posiciones a las que dio sus espaldas, siendo diezmado en su retirada.
Junto a los innumerables soldados castellanos que dieron su vida por evitar que la unidad de los pueblos de Portugal y Castilla se rompiera, murieron nobles como los hermanos de Don Gutierre, Lopy y su primo García de Quirós, dejando así presente el esfuerzo del Reino de Asturias por mantener tan noble propósito como es el de mantener unidos todos los pueblos ibéricos. De igual modo, dejaron su vida nobles Castellanos como Pedro González de Mendoza, señor de Hita y Buitrago, Juan Téllez de Castilla, señor de Aguilar de Campoo y primo hermano del rey, Diego Gómez Manrique de Lara y Leyva, señor de Amusco y Treviño, Juan Fernández de Tovar, Almirante de Castilla y señor de Berlanga, casado con una sobrina del rey, Diego Gómez Sarmiento, Mariscal de Castilla y I señor de Salinas, Juan Alfonso Tello, VI conde de Barcelos, almirante de Portugal y hermano de la reina, combatió en el bando castellano, Pedro Boil, señor de Huete y señor de Masanasa, aragonés de nacimiento, Juan Alfonso de Ajofrín, del linaje toledano de los Ben Furon, Gonzalo Díaz Carrillo, hijo del señor de Mondéjar. Todos ellos pertenecían al más alto escalafón social y nobiliario, lo que causó gran luto en Castilla.
Ayer he podido sentir en mi, no el abrasador calor pero si el cegador sol que estos hombres han tenido que padecer antes de morir en propósito de la tan ansiada unidad del territorio ibérico donde convivir todos los pueblos que lo habitamos.
Hoy he rendido cuentas del compromiso contraído con mi padre y abuelo de visitar esta sagrada tumba familiar. Lo hago en nombre de mis familia y en compañía de mis amigos
HEMEROTECA
La Batalla de Aljubarrota, el choque olvidado por los españoles
Día 25/09/2013 - 08.42h
- BÚSQUEDAS RELACIONADAS
PUBLICIDAD
Te recomendamos
Comentarios:
Para mí Portugal (yo nací en la Raya) es casi como una continuación de mi patria. cuando era chico, oía hablar en portugues a muchos viejos, especialmente cuando se reunian para tratar asuntos graves en el Ayuntamiento del pueblo donde mi abuelo era alcalde. Yo conocía la historia de Aljubarrota de forma muy velada, los viejos decian que en el ejercito español derrotado habia demasiados franceses...un pueblo orgulloso como el nuestro no daba su brazo a torcer...Al fin y al cabo fue el momento álgido de la historia de Portugal como nación, si hubieran perdido esa batalla, estariamos hablando ahora de otra Cataluña que perdió todas las batallas y a veces ni querían guerrear, en unos siglos que si no te jugabas el pellejo no ganabas nada y mucho menos la creación de un país. Y así hoy existe una nación Portugal y una autonomía Cataluña que quiere ser nación metiendose por recovecos de legajos, votos, cartas magnas y auxilios exteriores...y así va a ser muy dificil.
¡Muy bien!
Los editores de ABC son objetivos,esta vez!
A pesar de que tiene que llorar la muerte de mucha gente.Para qué?
Hay gente buena en este lado, Portugal, y desde luego en ese lado, en España.Esperemos que en el futuro la gente puede tanto tratar todos sus problemas y desacuerdos con una sonrisa! Esta es una señal de que será ese viviente inteligente!
Recuerdo a al profesor de portugués que nos decía; "de Espanha, nem bom vento nem bom casamento". Pero pienso que el ref'rán no es tan antiguo, creo que surge cuando Felipe II invadió Portugal en 1580.
La mayor parte de la Edad Media fue un constante conflicto entre Portugal y Castilla (no confundir con España), pero la mayor parte de los españoles lo desconoce porque precisamente Castilla perdió casi la totalidad de esas batallas, y no conviene mencionarlo en nuestra historia para permitir que el imaginario popular cree esa falsa idea potencia hegemonica.
Algunas de esas batallas saldadas con victorias portuguesas fueron: Sao Mamede (1128), Cerco de Lisboa (1384), Atoleiros (1384), Trancoso (1385), Aljubarrota (1385), Valverde de Merida (1385). Posteiormente a la Edad Media: Salga (1581), Cerco de Elvas (1644), Montijo (1644), Lineas de Elvas (1659), Estremoz (1663), Castelo Rodrigo (1664), Montes Claros (1665). Si no hubiera sido así, Portugal no seguiria siendo independiente después de 9 siglos. Lo cual hecha por tierra esa visión delirante de la "España" todo poderosa.
No se debe ser tan tendencioso y usar memoria selectiva en la hisoria porque al final te acaban pillando.
Está gran victoria portuguesa y gran derrota castellana de Joao I y juan I respectivamente, en su aspecto técnico fue prácticamente una copia de las tres grandes batallas de la guerra de los 100 años entre franceses e ingleses, aunque la tercera de ellas todavía no se había producido. Carga masiva de la caballería castellana, defensa de la infantería portuguesa en barreras preparadas antes de la batalla y arqueros que batieron a los pesados jinetes, melé, caos... la derrota. Entre las fuerzas castellanas había un fuerte contingente francés y entre los portugueses un contingente inglés, ambos ejércitos se vieron influenciados en sus tácticas por los capitanes que comandaban dichas fuerzas... lo curioso es que los franceses nunca aprehendieron nada de estas derrotas... Como se ve la historia se repite si se olvida.
Tengo la impresión que Portugal es un error histórico tremendo, y que los reinos españoles no debieron permitirlo nunca, pues fueron siempre aliados -por el interés de sobrevivir como reino- de los verdaderos enemigos de los pueblos de la península: los holandeses y los ingleses. Lo digo sin el mas mínimo ánimo de faltar al respeto a los portugueses a quien considero no primos, si no hermanos. Yo de niño tenía un profesor que casi lloraba cuando nos explicaba que ojalá hubiera un tiempo en que España y Portugal formasen la gran nación de IBERIA.
Olvidada sera ahora, cuando hice el bachillerato, al estudiar la edad media, se veía como materia.
Si los dos imperios hubieran seguidos unidos como cuando Felipe II, las dos naciones se hubieran beneficiado. Como se beneficio el Reino de Aragón al disponer de parte de la riqueza de América que descubrieron y conquistaron los habitantes de los territorios castellanos.
Cauto, mi comentario viene como consecuencia de otro que tonnadal hizo al mío...me da igual que Catalunia esté o no en España y no tengo especial preferencia. Eso es tema vuestro, pero de algo puedes estar cierto y es que conozco lo que pasa en Portugal infinitamente mejor que tu. Saludos.
Tonnadal, igual desconozco algún país que se haya independentizado de España y que esté mejor que España...el tema de Catalunia (y yo vivo en Catalunia) es económico...en el momento en que se negocie un acuerdo más favorable ya se hará silencio...
Olvidada por españoles, yo no diria tanto. Las relaciones con nuestros vecinos siempre han sido muy buenas por un motivo muy simple, cariño y respeto mutuo. Compartimos un pasado de admirable plagado de heroes descubridores y exploradores. Nuestras dos naciones abiertas al mar iniciaron la gesta definitiva de ir mas alla tal y como rezan las columnas de hercules de nuestro escudo nacional. Mucho tendrian que aprender los regionalismos separatistas de la relacion entre pueblos hermanos como son España y Portugal.
Mostrar más comentarios
No hay comentarios:
Publicar un comentario