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7 oct 2012

En 1874 nace mi abuela Dolores. Luego las consecuencias:1878, 1903, 1914,1933,2012

En 1874 nace mi abuela Dolores. Luego las consecuencias: 1878, 1898, 1903, 1914, 1933, 2012. Todo sucedió por no interpretar el silencio de mi amadísima y siempre presente Mami.

Hace unos dias lo hablaba con mi primo Manuel que vive en Ables, cerca de Pasau el Ríu, donde nació mi queridísima Mami, a la que debo el pertenecer a la familia que formó con mi abuelo materno Bautista, el hijo de Alvarin y nacido en La Corona, Silvota, Lugho de Llanera. Familia que crearon cuando ella tenía 13 años, el año de 1887. Curioso año para España, comandada por serviles ignorantes que pretendieron su destrucción. 

Bueno, Augusto, no pretenderás relacionar el matrimonio de tus abuelos maternos y el desastre de España. Hombre no, solo faltaría que fuera Mami el motivo del buen hacer de Rajoy. 

Hijas y sobrinos, no reaccionéis con violencia si este hombre inculpa a los bisabuelos en la prima de riesgo. Tampoco si identifica el Punto M, de interección entre la Oferta y la Demanda del Mercado, con el punto de intersección entre ellos. Augusto, sobrino, seguro que no fue lo que motivó que te licenciaras en Economía.

A mis hijas y sobrinos les digo que Manuel es el hijo de Carmen, hija de Vicente, el hermano ùnico de la bisabuela Dolores.

También les digo que mi hermana Madeleine y yo somos lughones. Y, que ellos lo son. No dudo que mientras el Hombre exista, ellos no dejaran de tener presente el serlo.

Manuel no habló conmigo, lo hizo con Augusto Pérez y, este, me lo hizo saber, como siempre reflexivo y con la pregunta ante mi silencio. Siempre me pregunta, nunca se imagina lo que pienso. Ambos somos personas y, por ello, entre nosotros solo hay palabra y, como campesinos que somos, cultivamos el Verbo, nuestro método vehicular de la Teoría, o Conocimiento. Nosotros no tenemos Libro Sagrado que nos diga como nos hemos de comportar.

El comportamiento de un Individuo Humano, o el de una Persona, puede ser resultante de carácter adaptativo y, en este caso es considerado normal. Cuando el comportamiento no es adaptativo, es considerado anormal. En este caso puede tener dos causas: Reactivo o Mórbido. A este último es frecuente que se le denomine Psicosis.  


El Homo Sapiens distingue el Comportamiento Reactivo del Mórbido. El Homo Erectus no distingue entre ambos comportamientos. Por su condición de no Sapiens, atribuye estos comportamientos a un Ser Supremo. Así es como el Homo Erectus entiende que el comportamiento de la Persona es manifestación de Premio y Castigo por el Justiciero. Este hecho es transmitido por los Homo Erectus por el Mito del Bien y el Mal, representados por el no reflexivo, o Erectus Caín y, por el reflexivo, o Sapiens Abel. El Mito del Elegido por el Señor y por aquel Negado. Este, al sentirse No Elegido responde, o reacciona de forma No Adaptativa. La causa de esta reacción es conocida como Envidia y el Homo Erectus se expresa como lo hace el personaje de una novela del siglo XIX que ayer hojee con motivo del asesinato de un Obispo, o Principe en Sarajevo al que se le atribuye el detonante del Comportamiento No Adaptativo denominado como Primera Guerra Mundial. Este personaje decía: "Nunca comprenderé el poco afecto que nos tienes salvo porque tengas un desorden psicopático. Cuando estés solo y jodido  no nos tendrás y apostaría que la otra familia postiza  que tienes tampoco".

Bueno, hice una adaptación al lenguaje de nuestros días, menos erudito que el de la novela. 

Los términos en los que el autor se expresa me hicieron recordar la fotografía, tomada en Alepo, en la que un padre tiene a su hijo muerto en los brazos, asesinado como espectáculo de la ONU. Me imaginaba la reacción no adaptativa, o Rabia por su impotencia. Esta fotografía me provocó una visión apocalíptica al parecérseme a la conocida del príncipe Francisco Fernando de Austria tendido mortalmente en el coche, a comienzos del verano de 1914. Acción que había tenido su primer aviso en 1903 con el asesinato de Alejandro I de Serbia y el posterior silencio latente de los que juraron terminar su propósito de vengar la opresión de la bestia.

Cuando sepa poner una fotografía en este diario, lo haré.

En esta fotografía el padre está en silencio. De este silencio no se puede decir que el padre ignora la envidia del asesino. De este silencio se deduce la irracionalidad del asesino y la racionalidad del padre. De este silencio se deduce la relación imposible entre la Bestia y el Hombre. Este ha sabido adaptarse y, ha sometido a su servicio a la bestia. Y lo ha hecho en momento y lugar que le ha sido conveniente. Siempre hay una mano dispuesta, sea de un Gavrilo, o de un Caracolillo.



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