Leyendo hoy el artículo sobre las metástasis cerebrales y los Astr
ocitos,a la vez que anoté sobre los edemas, me acuerdo de la obra de Henri Laborit y, concretamente sus dos libros sobre "neurofisiológica". Encuerdo que la segunda edición me la compré estando de estudio de la Licenciatura en Medicina y Cirugía. La primera edición
Me la leí tarde tras tarde en la
Biblioteca del Hospital de la Santa Cruz y San Pablo.
Entiendo que hizo de mi conocimiento médico el que lo basara en la fisiología y la fisiopatología; es decir, que estructurase mi conocimiento médico y mi actividad asistencial con bases científicas, o de relación causal.
Este modo de acceder al conocimiento y de implementar este en la asistencia a los pacientes me alejó y me sigue distanciando, de la educación recibida por aquellos con los que cohabito en los centros de atención. Este comportamiento me ha mantenido en una isla, o cohabitando con pequeñas islas que cohabitan en los centros de asistencia.
Un actividad diagnóstica y terapéutica basada en la ciencia es opuesta o, mejor anotado, es contrapuesta al saber médico, es decir, la medicina en España está basada en el saber, mientras que la medicina fisiopatológica, o científica, esta basada en el conocimiento.
Un ejemplo claro de la medicina que se hace en España es el examen de erudición, o dirigida que se hace en el llamado examen MIR.
La medicina basada en el saber requiere de la dirección, o pastor, de ahí viene el poder de las empresas diagnósticas y terapéuticas que dirige, o conduce lao asistencia médica por intereses económicos y no éticos.
En mi conocer diré que el médico que sabe sufre, mientras que aquel que conoce goza.
El que sabe depende de quien
le da comer, no de quien le nutre, por lo que compite con su cohabitante por el favor del que le da de comer, de aquí viene el cainismo, o injuria tan habitual entre los médicos,
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