Buscar en este blog

9 mar 2014

El problema sanitario y universitario de España.

En los últimos años del decenio seis del siglo veinte me vi en el compromiso personal de participar en la beligerante sociedad española a través del servicio público universitario o del sanitario. Decidí participar en la Sociedad a través de del servicio público sanitario.

En ningún momento de mi vida, ni aún en aquellos que sentí necesidad de borrar, opté por no prestar servicios públicos. Probablemente el ambiente histórico y actual de mi familia, liderada por el Azul de mi Padre, no hizo posible que fructificase la semilla de idiota que todo Individuo Humano lleva consigo genéticamente, visto desde la Ciencia, o Conocimiento parcial del Universo que es la Biología. La Educación para la Ciudadanía recibida desde el Medio Natural, o Familiar, hizo prevalecer la Epigenética sobre la Genetica, teniendo como resultado el espécimen de Individuo Humano que estoy siendo en el discurrir de la Historia desde aquella alumbrada por el Sol del SurEste a la que hemos dado en llamar Lughonia, desde el comienzo de la descripción que de la misma hizo LughJoMa a Lughio.

Desde aquellos tiempos de inquietud a los de hoy y que se proyectan más azules aún que entonces, deseó hacer memoria de mi gran amigo Augusto Pérez que, desde el Páramo llano y neblinoso condujo mis pasos en la pena, o espera hacia el sepulcro al que ya miro cada vez más cercano, allá en la ladera sur de la tierra firme que un día dio a la vida social a LughJoMa, al amparo de su Grand Madre Laura.

El problema sanitario
Augusto Pérez

El problema sanitario español es triple: técnico, social y político. Pero la gravedad de esta triple problemática sube aún más de punto si se advierte que ni el problema  técnico, ni el problema social, son solubles separadamente, sino que su resolución depende de la del problema político. Hacer ver que la causalidad, en definitiva política, de esta impotencia de la institución sanitaria para responder a las demandas de los tiempos modernos, no va a ser la tesis explícitamente elaborada a lo largo de este trabajo, sino la conclusión que, inexorablemente, se impone a quien, objetiva, imparcialmente, se enfrenta con el problema sanitario. Por ello, nuestro método consistirá en ir poniendo de manifiesto las dificultades, desajustes e incapacidad de carácter no político, por lo menos en apariencia. Tan pronto como intentamos ahondar en ellos, toparemos con el obstáculo siempre insuperable, por ser de naturaleza política. Y es que, en efecto, suprimir la vida política normal, es bastante fácil; pero más pronto o más tarde, como consecuencia de esa suspensión, todo se politiza.

El problema universitario
José Luis Aranguren

El problema universitario español es triple: técnico, social y político. Pero la gravedad de esta triple problemática sube aún más de punto si se advierte que ni el problema  técnico , ni el problema social, son solubles separadamente, sino que su resolución depende de la del problema político. Hacer ver que la causalidad, en definitiva política, de esta impotencia de la institución universitaria para responder a las demandas de los tiempos modernos, no va a ser la tesis explícitamente elaborada a lo largo de este trabajo, sino la conclusión que, inexorablemente, se impone a quien, objetiva, imparcialmente, se enfrenta con el problema universitario. Por ello, nuestro método consistirá en ir poniendo de manifiesto las dificultades, desajustes e incapacidad de carácter no político, por lo menos en apariencia. Tan pronto como intentamos ahondar en ellos, toparemos con el obstáculo siempre insuperable, por ser de naturaleza política. Y es que, en efecto, suprimir la vida política normal, es bastante fácil; pero más pronto o más tarde, como consecuencia de esa suspensión, todo se politiza.


En recuerdo al Profesor José Luis Aranguren y al Profesor Enrique Tierno Galván que tanto han condicionado mi vida política y mi vida idiota.

En nada cambia el problema universitario del sanitario, a mi entender. Por ese motivo lo único que hice cambiar del texto del Profesor Aranguren el término universitario por el de sanitario. Ello no quiere decir que él estuviera de acuerdo. Ahora que si me atrevo a decir a que el problema universitario se mantiene en el tiempo como él lo observó.

Está lejos de mi intención decir que el Profesor Aranguren aprobase esta osadía, o imprudencia, hecha por mi parte. Si, quiero manifestar mi respeto por su memoria.

Deseó exponer la preocupación personal por la degradación moral, o política. La necesidad de impartir en libertad "educación racional para la ciudadanía". Y ya dejar de lado la "educación irracional para el ciudadano"

No hay comentarios:

Publicar un comentario