Carta de Augusto Díaz-Ordóñez envía a su primo Víctor Díaz-Ordóñez con el fin de responder a las injurias que los habitantes de la pequeña Vetusta clariniana de mediados del siglo XX, vertía sobre él.
Era tiempo que Augusto deseaba poner orden sobre los asesinatos continuados desde principios de siglo por el reconocimiento de su legitimidad sobre la Casa de Quirós y el título de Conde de San Antolín de Sotillo que dieron lugar al asesinato de su esposa Amalia Bernaldo de Quirós y Argüelles, el 30 de septiembre de 1936 y, posteriormente, en 1962, el asesinato de él mismo.
Como le prometí en febrero de 1962 voy desgranando, poco a poco, su memoria y la de la abuela.
Transcribo la carta recuperada por mi hermano/primo Francisco. Le agradezco que me ofrezca ver la fotografía del abuelo a través de su preocupación.
Villabona de Asturias, 26 de Mayo de 1952
Sr. D. Víctor Díaz-Ordóñez
Mi querido Víctor: Como en una ciudad pequeña, como es Oviedo, no faltarán comentarios y gente curiosa que desee enterarse de los pormenores y origen del título y grandeza que yo pretendo, quiero ponerte en antecedentes para que sepas contestar, si lo crees oportuno, a los que te pregunten.
El Archiduque de Austria concede a Lorenzo Bernaldo de Quirós, el condado de Quirós, interin no presente él bienes sobre el que fundar la denominación de este condado.
La tal carta dice: (después del preámbulo), "que por los especiales servicios prestados por D. Lorenzo, como Coronel de Artillería en Flandes, y haberse encontrado en los gloriosos hechos de Armas (Aquí cita la toma de Lieja, y otras plazas fuertes), al servicio de mi tio D. Carlos II, y al presente, por los servicios que me estáis prestando en España. Por ser persona de Solar y Casa conocido en el concejo de Aller y por ser descendiente del conde de San Antolín, vengo a concederos este condado para vos y vuestros descendendientes, con la denominación de conde de Quirós, interin no señaléis vos terrenos donde fundarlo".
Aproximadamente en los mismos términos, cambiando los méritos personales de D. Francisco Bernaldo de Quirós en civiles, por ser este embajador extraordinario en Holanda, le hace la Merced de Grande de España, para sí y sus sucesores. D. Francisco era tio carnal de D. Lorenzo, según manifiestan ellos y la Real Carta.
Ahora bien, yo -amparándome en las leyes actuales- pretendo la rehabilitación de este título de conde y la Grandeza de su tio, unida a él, y en virtud de la facultad que le confiere la Real Carta de concesión de modificarla denominación -cuando presente bienes sobre qué fundarla- yo la aprovecho y solicito que siendo propietario, por herencia, del castillo de Ordóñez de Aller y actual poseedor -por sucesión directa- del condado de San Antolin de Sotillo, y por lo tanto consanguíneo probado de esos titulares, pido que se rehabilite a mi nombre la sucesión de estos títulos, con la denominación de Conde de Ordóñez del Pino de Aller con la Grandeza unida, de la que fue titular D. Francisco B. de Quirós, mi más próximo pariente.
Agrego en apoyo de esta solicitud, el que es la forma de perpetuar honoríficamente el apellido de Ordóñez, que llevó el Teniente General de Artillería, D. Salvador, de meritísima memoria, y con el cual el Estado está en deuda.
Creo que con estos datos podrás, en cualquier momento, aclarar cualquier duda que se le surja a cuaquier inoportuno, y dejar bien sentado que yo rehabilito un título de un descendiente del conde de San Antolin, título que llevo hace 30 años pacíficamente, y que en virtud del derecho que me concede la R. Carta, pido sobre mi apellido la denominación que pudiera ser esta u otra según mi antojo.
(Nota añadida a mano)
No lo pierdas pues seguramente tendrás ocasión de utilizar estos datos.
Un fuerte abrazo de tú primo que te quiere. Racuerdos a Lola.
Augusto
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