El Ejecutivo, Mediante su actividad política de despojar a los ciudadanos no ha conseguido reducir el déficit presupuestario. Ni tampoco con la acción tramposa de no introducir la donación hecha a la Banca.
El seguir con una administración negativa (detractiva y no productiva) nos llevará a un mayor endeudamiento.
No hay confianza en las manifestaciones de "listeza" del Ejecutivo. Manifestaciones que traducen su ignorancia de como conducir nuestra Administración Política a la positividad, al crecimiento.
El Ejecutivo ha de hacer Política Social y Económica. No ha de hacer Política Económica.
El Ejecutivo está construido por técnicos de economía, con mínimos conocimientos de ingeniería contable. Tan mínimos que no son capaces de engañar a los no técnicos, ni en su definición ni tampoco en la interpretación de los resultados. Resultados nefastos.
El Ejecutivo, dado el plazo de un año y los resultados obtenidos, ha de dimitir. Y, si su osadía vergonzosa y vergonzante, no les permite la aceptación de sus errores y fracasos, la llamada "Oposición" ha de situarse fuera del Congreso ade los Diputados.
Y, si la Oposición tampoco admite su comportamiento de consentimiento y colaboración con el Ejecutivo, la Sociedad de España tomará por la fuerza el Congreso de los Diputados y expulsará del Templo ( lugar de encuentro entre hombres y sus representantes en la administración de la vida pública) a los malditos que lo han profanado.
¡Malditos seáis condenados al Olvido de quienes han depositado en vosotros la nobleza suprema que es la confianza!. ¡Bestias!. Y como bestias seréis tratadas.
La Unión Europea no ha de reconocer al Ejecutivo de España como representante del Estado en base a su incompetencia y reiterada acción de "mentira política" y acción de robo con escarnio de la Sociedad de España.
La parálisis política del Ejecutivo deviene de su ignorancia y de su incompetencia en base a la corrupción existente en su organización. Organización que no merece ser llamada Política, al ser este el calificativo más noble que una organización social puede recibir. Todo lo opuesto, ha de recibir el calificativo de organización vil y reptante.
Que la estimación de descenso del PIB fuera del 0,5% y que la obtenida sea del 1.5%, no es consentible por mente racional alguna. El cese fulminante de los ministros de Economía, Hacienda y Trabajo, ha de ser inmediata y sin fotografía pública. No hay despedida, sino olvido.
No se ha de admitir dos años más por la UE. El déficit está creciendo de tal modo que la ruina se prolongará más allá de cien años.
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