Ayer escuchaba atónito decir que el paro (es decir, la participación social. O, la inversión, o regresión social hacia la población) en España se había reducido en 31 personas. De esa cifra, los Individuos Humanos del Gobierno (Ejecutivo y partidos políticos), indudablemente educados en ciencias blandas, decían que era un claro signo de éxito en la política económica y hacendística.
El Cálculo de Probabilidades y el sentido del ridículo, no es lo suyo.
Bueno, que Rajoy, Rubalcaba, y el resto de los presentes en eso de la política (con minúscula), se pongan ahí. Sí, ahí, delante de mi y con las manos sobre el culo.
¿Para qué?
Por preguntar, tú también.
¡Ay!.
¡Que te calles!, que te doy otra vez. A mirar contra la pared y en la esquina. Sin rechistar.
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