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30 sept 2013

Lo que no tiene nombre.

"Es el libro más misterioso desde el punto de vista del proceso. La palabra no es tanto dolor en ese momento, sino terrible desconcierto; desconcierto con la vida, no es desconcierto de que él se matará, pero sí preguntándome ¿me pasó esto?, ¿cómo me pasa esto con este muchacho y después de todo lo que hicimos?, porque hicimos todo  y no pudimos detener el destino, que fue la idea que hizo generar el libro".

Así se recogen  las palabras analógicas de Piedad Bonnett, nacida en Antioquia, Bogotá, el año 1951. Habla preguntada sobre su libro "lo que no tiene nombre" (Alfaguara, 2013).

Oportuno libro.

He anotado como se hace el diagnóstico médico y judicial, racional, o científico.

Llama la atención que ponga en segundo lugar de mi quehacer médico la fractura y ponga todo mi esfuerzo en conocer la relación de causas que terminó con la fractura. Y, en caso de la muerte, por homicidio, me ocupo en saber la relación causal que terminó en el homicidio.

Me conmueve el corazón la muerte de la niña pero no me conmueve el corazón, sino la cabeza de la real avión causal de una madre, un padre, o de ambos que termina con el posible asesinato de su hija. Como médico, como juez, he de actuar sin corazón, sino con cabeza.

La entrevista a la autora del libro, que se acompaña de una interesante bibliografía, es recomendable leerla. Se publica en la página 34 del diario EP, de hoy 30-09-13.

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