Vida de salud

Hoy, hacia las cuatro de la tarde, yendo en coche hacia casa, oí por la radio hablar sobre la "sarcopenia". Paré el coche para escuchar. 

De dije que se está preparando la venta de una "enfermedad nueva" que, probablemente substituya el intento hecho con la que han dado en llamar "Fibromialgia" y que, en los últimos tiempos, ha ido perdiendo "fuelle comercial"

En estos días últimos he hecho una anotación del diagnóstico científico, o de relación causal de la entidad que he denominado como "Insufiencia Muscular Secundaria a un modo de vida (beber agua, comer alimentos y descansar) inadecuado según los criterios científicos de Salud. Lo hice para contraponer el modo de vida  no científico que dicta el Papa Francisco en su obra "evangelii Gaudium"y que es contrario a los criterios científicos de Salud.

Cuando se leen los números escritos que hacen referencia al término "sarcopenia", se puede observar que todos, todos, tienen una base epistemológica creacionista, o no racional, la misma que el texto del Papa Francisco.

Las casualidades sólo se dan en mentes Creacionistas,o no racionales. Por este motivo, la aparición de los textos sobre "sarcopenia" esta relacionada con la aparición del texto sobre el"modo de vida según los evangelios".

Me cuesta, por mi cultura, pensar en la relación causal de la aparición de la sarcopenia y la vida según los evangelios.

 No podemos tener un modo de vida de acuerdo con la Constitución de 1978 y un modo de vida de acuerdo con los Evangelios. Ambos modos de vida no son opuestos, sino inversos. Y el matiz lo es por el significado exacto y preciso que oposición e inversión tienen en lenguaje matemático, o de la matemática de la ?Física, de la Ciencia.

No debemos, éticamente ni moralmente (política, arte de administrar lo común, o público) seguir haciendo una asistencia sanitaria basada en principios creacionistas , o, en particular, evangelistas. Hemos de hacer una asistencia científica, racional, la que hace posible una existencia y una historia digna de hombres libres, o liberados del yugo, o esclavitud de la asistencia sanitaria creacionista.

Téngase en cuenta que aquello que cacareamos, hablamos sin reflexión, o hablamos en "politejo" como con sabiduría racional denominó mi abuela Dolores. Digo que aquello que referimos como "público" es más propio nombrarlo con el término "común". Y, lo común es aquello que relaciona con carácter de interacción a los Individuos Humanos, a los que eleva, o extiende, a la condición de "personas" y, a su conjunto "sociedad" que tiene como propiedad primera la "fuerza de la gravedad", la fuerza creadora en el Universo que lo hace ser proteiniforme, adaptable, o progresista.