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21 dic 2013

El gato español está al acecho.

La Comisión Nacional de Mercados y Competencia ha denunciado "circunstancias atípicas" en el proceso de subasta del precio de la energía eléctrica.

Entiendo que la CNMC ha detectado acción delictiva en el proceso de subasta del precio de la energía eléctrica.

Lo que me ocupa es que difunde sus sospechas y la medida que toma de suspender tal subasta pero, me deja perplejo al conocer que su actuación de no demandar ante la justicia tales hechos delictivos, ella misma, la CNMC ESTA COMETIENDO UN DELITO.

Es evidente que la actitud de la CNMC tiene como finalidad la de mentir a la Sociedad de España con el ánimo de justificar el hecho delictivo que manifiesta haber detectado.

Y, el Ejecutivo, con su mano izquierda, o fiscal, tiene el mismo fin o, al menos, corre paralelo, sino forma parte de una estrategia conjunta.

He de decir que aunque el gato tiene pegada a tierra su cabeza y cuerpo, está levantando la cruceta con el fin de esperar el momento de descuido del Estado para saltar sobre su cuello.

El gato no es idiota, es un felino "domesticado" pero sigue siendo "no humano" y con la propiedad de ser cazador, depredador de bipodas sin pluma. A los plumíferos les sorprende por los "corb(v)ellones"

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