Doña Matilde García-Mauriño
Mujer de privilegiada cabeza y exquisita compostura, ha escrito, con extraordinario realismo y virtuoso hacer, dos libros que son Memoria del nacimiento de Asturias, sabiendo muy bien situarla en el lugar de la primigenia Europa, hoy tan necesitada del reconocimiento de sus padres y de una madre Manuela que la hizo crecer, bautizándola visigoda.
Una Europa que sale fortalecida hoy al confirmarse su querer formar parte de la familia de Manuela que le dio de comer allá en tierras de Quirós y la educó en la memoria de los padres que la engendraron con la sangre de los reyes de las Galias, como el rey carolingio nombraba a las recias gentes que habitan Asturias, León y Galicia.
Que así quiero expresarme atravesando con cierto enfado y gozo, los tiempos de mis gentes, a las que quiero recordar siempre el compromiso que adquurí ante mi abuela Dolores, allá en el comienzo del verano que vieron mis recién estrenados ojos de dieciséis años.
Abuela, tú mandato de no hablar nunca politejo me esfuerzo fácil en cumplirlo y, hoy, en el inicio de mi invierno, te renuevo el compromiso, aquí, ante tú Memoria, siempre mayúscula, y en compañía de mis hijas que también se comprometieron a cumplir.
Son libros para leer vosotros y educar a vuestros padres, hijos y vecinos. Son libros que sirven para sentirse orgullosos de conocer a su autora y, a través de sus hermosas palabras hiladas en el pañuelo que sobre nuestros hombros, nos harán sentir orgullosos de ser Europa desde estas tierras de Asturias.
- La Silla del Rey.
- Adiós Rey Magno.
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